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miércoles, 29 de diciembre de 2010

LA LEY DE EDUCACIÓN UNIVERSITARIA: OPORTUNIDAD PARA EL CAMBIO.

Dr. Juan Eduardo Romero

            La reciente aprobación de la Ley de Educación Universitaria (LEU) ha generado un debate importante que tiene dos puntos esenciales: 1) el carácter de las instituciones de Educación Universitaria (antes Educación Superior) en un contexto de cambio socio-político y 2) el significado del debate acerca del pensamiento político y andragógico en nuestras instituciones.

viernes, 3 de diciembre de 2010

OCIO, TIEMPO LIBRE Y RECREACIÓN EN EL SOCIALISMO. Eloy Altuve


     Ocio, tiempo libre…..son conceptos, categorías, que empiezan a manejarse y tener cabida socialmente, cuando aparece la propiedad privada,  se produce la expropiación de los medios de producción a los trabajadores directos y se concentran en los propietarios, estableciéndose la separación entre el    tiempo de trabajo y el tiempo del NO trabajo (llamado también tiempo libre).
     Particularmente, en el caso del capitalismo industrial, la consigna que  resume las luchas obreras de finales del siglo XIX y principios del XX, hace alusión al tiempo libre, reconociendo la existencia de un tiempo de trabajo y de un tiempo de No trabajo: ocho horas de trabajo, ocho horas de estudio o educación y ocho horas de recreación.  Desde esta época, comienza una  vertiginosa producción de literatura sobre el tema, apuntalada o estimulada  por el aumento –en términos sociales- del tiempo del NO trabajo sobre todo en el mundo occidental industrializado, debido al desarrollo y aplicación de la ciencia y la tecnología en la producción de bienes materiales. En el siglo XXI, por paradójico que parezca, a pesar del intensivo y extensivo desarrollo científico-tecnológico el tiempo del NO trabajo pareciera tender a disminuir incluso en los países más poderosos económicamente (en Francia y España se está promoviendo aumentar la edad para la jubilación; Grecia, en mayo 2010, está a punto de aplicar un paquete neoliberal, medidas de shock económico apuntaladas por el FMI), mientras en el tercer mundo la tercerización de los trabajadores crece en proporciones geométricas, disminuyendo aún más el tiempo del NO trabajo.

viernes, 26 de noviembre de 2010

DECLARACIÓN DE APOYO Y ACOMPAÑAMIENTO A L LUCHA DEL PUEBLO INDÍGENA YUKPA

Red Socialista

Por la conformación de una Corriente Revolucionaria dentro del Proceso Bolivariano

Maracaibo, 06 de noviembre del 2010

DECLARACIÓN DE APOYO Y ACOMPAÑAMIENTO A L LUCHA DEL

PUEBLO INDÍGENA YUKPA

Quienes nos hemos reunido con la finalidad de buscar alternativas revolucionarias dentro del proceso bolivariano observamos con especial atención que las políticas que se dirigen desde los Ministerios de Ambiente y Pueblos Indígenas hacia la población Indígena Yukpa debe trascender el asistencialismo, al mismo tiempo que reconocer y respetar las disposiciones legales, constitucionales y acuerdos internacionales de la OIT y ONU, suscritos por la República Bolivariana de Venezuela en los años 2001 y 2007, respectivamente, para concretar la demarcación de su territorio ancestral indígena en Perijá, saneado de terceros, de proyectos mineros y ganaderos. En el mismo sentido le decimos al Gobierno Nacional Bolivariano que los derechos indígenas a la jurisdicción propia, conforme a sus formas tradicionales de organización social, cultural, política y económica, además de ser derechos de inmediata aplicación, no pueden estar subordinados, en orden jerárquico inferior, al ordenamiento civil y penal de la nación, sino que siendo distintos, estos no han necesitado del estado y del derecho positivo para su validez y aplicación, por ello resulta obligante para el Estado y los órganos de gobierno, respetar su existencia, vigencia y valor social para las culturas indígenas.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Red Socialista

I
Venimos de la militancia y convivencia en consejos comunales, sindicatos, medios comunitarios, partidos, movimientos estudiantiles, grupos culturales y ese generoso y ancho mundo de las organizaciones y movimientos sociales. Desde allí juntamos ánimo y voluntad para sumar fuerzas en favor de la revolución y el socialismo.
Reunimos, por tanto, experiencia, pero sobretodo disposición para continuar las luchas de hoy, tejiendo redes que hagan posible el sueño y el trabajo compartido por la creación de ciudadanía, democracia, socialismo, y poder popular.

Declaración de abril. PROPOSICIÓN DE DECLARACIÓN, EN VALENCIA, EN UN AULA DE LA AMISTAD, LA SOLIDARIDAD Y EL COMPROMISO

En nombre de la amistad, la camaradería, las luchas compartidas durante décadas, juntos y por caminos comunes o vecinos, con el pensamiento, los sentimientos y los sueños cobijados o íngrimos, acompañando a los hombres y mujeres; a los trabajadores, a todos los pobres; a todos los jóvenes; a los poetas, artistas, escritores, investigadores y creadores de nuestro país; con nuestros excesos, deficiencias, aciertos y desaciertos, pero con honradez, coraje y dignidad, con fe y esperanza profundas en otro destino y porvenir para nuestro pueblo, América Latina y el mundo, hoy , quince de abril de 2010, con el inicio de las primeras lluvias para el reverdecer del monte, el florecer de los apamates y araguaneyes y la fecundidad de la tierra que anuncia la próxima cosecha, pedimos permiso para declarar lo siguiente:

Observatorio de medios comunitarios. Orlando Villalobos Finol / orlandovillalobos26@gmail.com

El observatorio de medios comunitarios es una organización que surge para cumplir con diversos propósitos, siendo los principales, en primer lugar, promover la investigación y reflexión teórica sobre la comunicación comunitaria, ubicando sus antecedentes y las tendencias actuales, a partir del examen de su importancia en el ámbito comunicacional y del estudio de casos y de experiencias específicas.
En segundo lugar, mantener información actualizada del paisaje mediático de los medios comunitarios.
En tercer término, contribuir con la formación de los promotores, participantes y colaboradores de los medios comunitarios.

viernes, 5 de noviembre de 2010

ASAMBLEA DE SOCIALISTAS. 06/11/2010

Maracaibo, 25 de octubre de 2010


Recibe ante todo nuestro saludo revolucionario. Por medio de la presente te invitamos a participar en una ASAMBLEA DE SOCIALISTAS que se realizará el sábado 6 de noviembre, desde las 8:30 a.m., en el edificio Grano de Oro de la Facultad Experimental de Ciencias de LUZ (auditorio, planta baja), la cual tendrá como objetivo el DEBATIR SOBRE LA CONFORMACIÓN DE UNA CORRIENTE REVOLUCIONARIA DENTRO DEL PROCESO BOLIVARIANO. Compartimos las ideas de varios camaradas que han expuesto ideas similares recientemente:

Notas Urgentes. Carta a mis compañeros. Julio Escalona

14-10-10

Con mi más profunda solidaridad, aprecio, respeto y con todo el afecto de mi corazón, me permito dirigirles unas palabras. No es un análisis, es más bien un intento para pensar juntos.
Todos sabemos que el proceso venezolano vive una fase decisiva. Esto suena a lugar común, pues siempre estamos como viviendo etapas decisivas y en verdad, este proceso cada día, cada mes, cada año, vive momentos decisivos pues los procesos de transformación son así.
Ahora bien, siendo que lo anterior es cierto, una acumulación de acontecimientos nos ha conducido a un momento crucial. Una de las muestras de sabiduría que debemos dar, es poder comprender las peculiaridades del momento actual. Creo que por la naturaleza misma de los acontecimientos, esta no será una comprensión sólo individual. Será el resultado de nuestro encuentro colectivo, de nuestras reflexiones colectivas, por supuesto, a partir de la aproximación que individualmente cada quien vaya haciendo, que se va completando con el pensamiento colectivo y así sucesivamente. Como dijimos cuando se publicó el Voto Nulo, es un proceso de aproximaciones sucesivas, siendo cada una, un punto superior que se va superando uniendo la reflexión y la lucha.
Es muy claro que este proceso implica victorias. Dafnis Domínguez las señala bien en el primer párrafo del trabajo que nos envió. A renglón seguido nos alerta sobre el peligro del triunfalismo.
Ahora, hay derrotas importantes y el discurso del Presidente Chávez en el Teresa Carreño, el 2 de octubre, las señala muy bien. Las causas vienen apareciendo claramente desde el referéndum constitucional del 2 de diciembre de 2007. Los hechos de ese momento ni los que se han suscitado en posteriores elecciones han sido estudiados detenidamente. Estoy diciendo los hechos, no sólo los resultados electorales. Ante las circunstancias que se presentaron, el Presidente Chávez planteó las tres R, sobre las cuales no ha habido balance y mucho menos seguimiento. Lo mismo ha ocurrido con los procesos electorales posteriores. No hay reflexión profunda ni rectificaciones ni seguimiento.
Uno de los hechos más notables es que estamos violando una de las leyes fundamentales de la guerra, no solamente las militares, sino las que son eminentemente políticas.
En las batallas debemos, en primer lugar, conservar la propia fuerza y en segundo lugar incrementarla en la medida que se debilita la fuerza del enemigo. Una parte esencial que podemos destacar es que hemos logrado conservar el núcleo de nuestra fuerza y eso ya es una victoria, pues mientras un ejército conserva el núcleo de su fuerza, puede sortear los altibajos de la guerra, sobreponerse a las derrotas tácticas manteniendo la capacidad de transformar las derrotas en victorias hasta arribar a la victoria estratégica.
Ha ocurrido que consistentemente la oposición ha venido incrementando su fuerza y se ha venido sembrando en núcleos populares importantes. Es decir, está creando las condiciones para constituir un núcleo estratégico de fuerzas populares. No lo ha logrado y ciertamente si hacemos lo que hay que hacer, podemos impedir que lo realice.
No debemos desestimar por supuesto, los núcleos de fuerza que han creado en los estados fronterizos, particularmente en Zulia y Táchira, que tienen un gran valor estratégico que aunque tienen un gran impacto nacional, todavía no están debidamente articulados con los núcleos que están constituyendo en el Distrito Capital, en Miranda, Aragua y Carabobo. Estos son núcleos menos consolidados que los de Zulia y Táchira. Es vital impedir que consoliden esta fuerza y la articulen nacionalmente y en particular con las zonas fronterizas. Si eso ocurre, sería, desde el punto de vista estratégico, un gran peligro para el proceso venezolano.
Este cuadro general nos plantea varias tareas esenciales:
1) Debilitar hasta anular políticamente las bases populares de la oposición para impedir que consolide sus fuerzas. Si dejamos que se consolide entonces puede crear bases estratégicas y como ya dijimos, nuestro proceso se vería en serias dificultades.
2) Simultáneamente recuperar y consolidar estratégicamente nuestra base popular a través del país.
3) En un solo proceso trabajando con los temas anteriores, acompañar la recuperación y consolidación estratégica de nuestra base popular, con ataques tácticos de significación estratégica para irlos arrinconando paso a paso a lo que son sus bases naturales, es decir los sectores de clase media alta y la burguesía, que de hecho, son clases transnacionales, es decir, no tienen interés nacional y ese es su flanco débil. Esto implica éxitos organizativos, políticos, en la gestión de gobierno y en la batalla por las ideas.
4) En la medida que vayamos avanzando política y organizativamente, vamos tendiendo un cerco sobre sus bases, que deberá impedir que puedan desplegarse. Un cerco estratégico que se estrecha como cerco táctico sobre sus fuerzas. Con la seguridad de que en la medida que vayamos ejerciendo esa presión, ellos van a ir perdiendo la cabeza y se presentarán en forma desnuda con su faz transnacional proestadounidense. Ellos tienen recursos demagógicos suficientes como para hacer gestiones de gobierno, aceptables por sectores populares.
Los objetivos anteriores, como ocurre con las tareas revolucionarias, no son fáciles, pero sin duda posibles.
Ello requiere una propuesta política y un plan, que no es el objetivo de este papel de trabajo que les estoy enviando. Sin embargo, puedo adelantar unas líneas gruesas.
Algunas de esas líneas pueden ser:
1) La base de su crecimiento está constituida por los prejuicios políticos fundados en el anticomunismo, los sentimientos anticubanos, el culto a la propiedad privada (incluso de los que no tienen nada que perder) y el miedo a perder lo poco que han acumulado (propio de sectores de la clase media y de gente empobrecida afectada por todas las inducciones fundadas la prioridad del tener sobre el Ser). Esta es la batalla más difícil, que es por supuesto una batalla por la educación de la mente y el espíritu de la gente. Es la derrota del egoísmo, que sostiene al individualismo, al espíritu de competencia llevándose a los demás por delante. Sin embargo, como plantearé luego, esta es una lucha eminentemente práctica, a través de resultados concretos del proceso revolucionario. Aquí son valiosos los aportes que hace Dafnis sobre el poder comunicacional y las características de los procesos electorales
Si se analizan los resultados electorales de la elección presidencial de 2006, nos encontraremos que es el proceso en el que más votos hemos obtenido. Estos fueron los resultados. Chávez: 7.309.080 votos, equivalentes a un 62.84%, y Rosales: 4.292.466 votos, equivalentes al 30.90%. Este fue un momento de auge de las políticas sociales y de fortalecimiento de la confianza. Por eso cuando aparecían deficiencias, la población tendía atribuirlas a los alcaldes, gobernadores, etc.
Luego, nuestra votación ha ido disminuyendo. Quizás lo más serio de esa disminución, es que se viene dando en sectores populares. Ello ha estado relacionado con graves fallas en las políticas sociales, con las notarias ineficiencias burocráticas, con la aparición de fenómenos vinculados a la corrupción y en general, con la pérdida de impulso del proceso de transformación, especialmente en lo relacionada con las políticas sociales. Lo que ha provocado desesperanza, descontento y frustración. (Para el análisis político-electoral es importante la lectura del trabajo que sobre el particular elaboró Edgardo Lander).
2) Lo dicho indica que nuestra mayor vulnerabilidad ha estado vinculada a los propios errores del proceso. La oposición ha crecido, no tanto por méritos propios, sino por nuestros errores e insuficiencias. Ciertamente, aún no ha propuesto un proyecto de país; pero debemos reconocer que para la oposición eso no es una prioridad. Vive de la campaña en negativo, es decir de nuestros propios errores y de la fuerza de la tradición y la costumbre. Del sedimento reaccionario que se encarga diariamente de consolidar y multiplicar. Para lo cual cuenta con el poder mediático del que habla Dafnis. Su programa esencial, pues, consiste en consolidar las bajas pasiones, el egoísmo, el individualismo, etc.
Es la fuerza de los prejuicios mencionados en el punto 1, lo que tiene que ver con los más de 4 millones de votos que saca Rosales. Sin embargo, pese a ello la votación obtenida en el 2006, superó ampliamente a la obtenida en el referéndum revocatorio de 2004. Es decir, la acción social del gobierno y toda la labor de pedagogía política que llevó a cabo el Presidente Chávez, lograron neutralizar los prejuicios políticos.
3) La acción mediática tanto nacional como internacional ha tenido una influencia notable, pero cuando ha podido ser contrastada con hechos que hablan por sí mismos, también la acción mediática ha podido ser derrotada.
4) En la derrota de la acción mediática ha tenido un peso importante la acción de las redes sociales “chavistas”. Esas que en abril de 2002, con los medios de comunicación pública clausurados por los golpistas, con los medios de comunicación privados censurando las informaciones y desinformando, fueron capaces de movilizar a la población para derrotar el golpe de Estado.
Esas redes sociales fueron más eficientes que lo que hoy es el PSUV para movilizar a la población. Incluso, más eficientes que los medios de comunicación estatales actuales, no en el momento en que estuvieron clausurados.
Esas redes sociales, es mi opinión, se han debilitado y ese debilitamiento tiene que ver con los resultados electorales.
Mi experiencia de décadas como luchador social me dice que ahí donde hay líderes sociales reconocidos por la población a través de la lucha constante, su voz fundada en la práctica diaria, con la gente y entre la gente, como uno más, es más importante que la de los medios de comunicación reaccionarios. Los medios construyen y reconstruyen la realidad, precisamente para negar la realidad cotidiana, la que podríamos llamar, redundancia incluida, la realidad realmente existente. Esta es la realidad que los medios tratan de ocultar, pero cuando las organizaciones revolucionarias están sembradas en el pueblo, no resulta fácil para los propagandistas de los medios, superponer una realidad virtual sobre lo que la gente cotidianamente vive y los líderes comunales se encargan de señalar. Más difícil, creo, es luchar contra el entorno que se genera cargado de valores negativos, claramente reaccionarios que se imbrican con la fuerza de la tradición y la costumbre.
En esa batalla los medios de comunicación públicos y muy particularmente las emisoras de radio y televisión locales, pueden dar una gran contribución. Lo ideal es articular medios de comunicación con redes sociales. Sobre esto he escrito en otros espacios.
Por supuesto, hay que desarrollar, fortalecer y perfeccionar recursos mediáticos. Ello es fundamental, pero la maduración de la conciencia y el alma revolucionarias, no es un asunto mediático. Requiere experiencia política concreta, pues es un proceso social y político fundado en la educación, en el trabajo político y de organización en el barrio, en el campo, en la urbanización, en la visita casa por casa. Los medios radioeléctricos no deben sustituir a los hombres y mujeres que maduran y crecen políticamente a través de la lucha social. Pero pueden dar una gran contribución en la medida que muestren gente de verdad y hechos concretos que desvirtúen la realidad virtual que presentan los medios reaccionarios. Lo que no niega que esa realidad virtual suele apoyarse en hechos reales, generalmente descontextualizados y a veces tal como ocurren cuando nos equivocamos. No todo es mentira mediática.
También es necesario desarrollar la organización política. Ahora bien, la organización en la base popular orientada a la transformación de la vida cotidiana, a través de la convergencia de los sectores explotados en la defensa de sus intereses colectivos y personales, rebasa la estratificación partidista que tiende a establecer separaciones sectarias. Esta no es una negación de la organización partidista. La gente tiene derecho a militar en el partido que desee. Esa es una libertad básica. El tema es que la acción partidista no siempre es el resultado de los conflictos de clase. Muchas veces esa acción lo que genera es fragmentación social provocada por intereses sectarios en función de los intereses grupales que los partidos suelen representar, incluidos partidos que se denominan revolucionarios.
Los partidos revolucionarios se ponen a prueba en su capacidad para levantar la lucha desde el interior de la población, como uno más, cuando el partido es pueblo y no una capa especial de cuadros. Esto no se logra simplemente con la agitación y la prédica desde fuera. Sería interesante revisar lo que sobre esto decía Marx en los documentos de la I internacional.
La clave de nuestros éxitos en el 2006 estuvo precisamente en la capacidad para transformar la vida cotidiana. Barrio adentro colocando por primera vez médicos en las comunidades pobres; las escuelas bolivarianas educando y alimentando a los niños pobres; la misión Samuel Robinson eliminando el analfabetismo, y en general el trabajo de las misiones alentando esperanzas, fue la mejor arma para impulsar el socialismo. Por eso Chávez saca más de siete millones de votos, que no expresaban en su totalidad una conciencia socialista, pero que fueron capaces de superar los prejuicios políticos y dar un paso adelante.
5) Si lo anteriormente dicho es cierto, entonces ahí están las claves para consolidar nuestras bases, preservar las fuerzas populares y sobre ese fundamento multiplicarlas, debilitando la base popular de la oposición.
Recoger la basura, reparar las calles y avenidas, eliminar las causas de las inundaciones y los derrumbes que liquidan las viviendas de los pobres dejándolos en la calle sin esperanzas, garantizar la eficiencia de los hospitales y las escuelas, combatir la corrupción, garantizar la seguridad personal, etc. son tareas, que en sí mismas no significan una revolución. Pero hacerlas eficientemente, sin corrupción, con verdadero espíritu de servicio orientado a brindarle a la gente mejores condiciones de vida, que fortalezcan la esperanza en una sociedad más justa, es una revolución.
Ahora cuando hay alcaldes, gobernadores y diputados de la oposición, está planteada una lucha abierta por la solución o la gestión de los problemas populares. La solución, si es real, se hace con el pueblo como constructor de las soluciones. La gestión se hace desde fuera, con jefaturas colocadas por encima del pueblo que actúan como salvadores, como dueños de un poder que es el que “soluciona” tratando de comprar la voluntad popular.
Las llamadas redes populares que la oposición ha ido organizando, crecen en la medida en que mucha gente cree en sus ofertas para mejorar la vida cotidiana. Y lo pueden hacer y lo están haciendo, precisamente, porque la solución de un problema por aquí y otro por allá, no significa una revolución y probablemente tampoco una solución real. Son las “soluciones” que van siendo como una horca en torno a la esperanza.
Hoy día en Venezuela no es difícil para un alcalde o un gobernador, gestionar las reivindicaciones populares con relativo éxito. Los problemas acumulados son tantos, que si logran recoger la basura de manera regular y mantener limpia la ciudad, garantizar el alumbrado público, reparar las calles y aceras, atender medianamente las escuelas, solucionar así sea transitoriamente algunos de los problemas graves de las barriadas populares, ya podrían garantizarse la reelección y la conformación de una base popular. Ello sólo puede ser enfrentado con una eficiente labor combinada del gobierno nacional y las redes sociales que trabajen por soluciones de fondo, que vayan más allá de maquillar la realidad.
Ahora la oposición tiene alcaldías y gobernaciones en varios de los centros populares más importantes del país, tiene un importante número de diputados, que pueden presentar proyectos para leyes demagógicas; ha ido desarrollando redes de acción social y dispone de amplio financiamiento, que lo suministran organizaciones internacionales, particularmente estadounidenses.
Sin embargo, eso no es lo decisivo. Lo decisivo es que ellos no creen en el pueblo, ellos no están dispuestos a tocar los intereses de los poderosos y no van más allá de realizaciones superficiales. Pero bien sabemos que una dosis de demagogia unida a un gran poder mediático, puede constituir una seria amenaza. Sería grave subestimarlos.
6) Confiar en nuestras propias fuerzas sobretodo cuando esa fuerza es la fuerza del pueblo, que no es nuestra propiedad, es fundamental. Ese es un proceso en el cual debemos saber apoyarnos en los rasgos específicos de la revolución venezolana. Sobre esto publiqué un trabajo hace un tiempo, ahora sólo quiero recordar algunos aspectos.
6.1) Esta es una revolución que como consecuencia de los ingresos petroleros, dispone de abundantes recursos financieros. Esto es muy importante. Nos ha permitido ser solidarios con otros pueblos y emprender obras fundamentales para el bienestar de nuestra sociedad, pero ello puede acentuar y ha acentuado el facilismo de los venezolanos, aquello de que nos gusta la papa pelada. En todo caso, tiene muchas ventajas, pero la amenaza de corrupción, de derroche, de ausencia de espíritu de sacrificio, siempre será un peligro. Lo importante es saberlo, combatirlo y corregirlo.
6.2) Esta revolución no es atea y tiene un amplio espacio para la convergencia de los creyentes y no creyentes, religiosos o no religiosos. Es una revolución que pone a prueba la sinceridad de la práctica religiosa.
6.3) Es una revolución muy diversa y plural. Aquí confluyen marxistas de muchas corrientes, anarquistas, cristianos de diversas tendencias, religiones orientales, no creyentes, etc. Esta es una gran fortaleza que lleva a que la lucha por la hegemonía, como simple lucha de ideas, no tenga sentido. La clave es el proceso práctico en el que va madurando la conciencia popular y la de nosotros como parte del pueblo. Ninguno de los revolucionarios venezolanos por años de lucha que tenga o por leído que sea, conoce todas las claves de este proceso. Siempre estamos aprendiendo algo, sin necesidad de rendirle culto a los libros, pero dándole una gran importancia y privilegiando la lectura.
6.4) Es una revolución consustancial con la democracia y las consultas electorales; con la movilización permanente del pueblo y su creciente politización. La solución de los problemas tiene que ver con más democracia, más consulta popular, más movilización, más politización y por supuesto más soluciones a los problemas populares en la medida que una mayor democracia vaya logrando, que el pueblo sea el autor de las soluciones. Esto es algo que no debemos olvidar. Es la oposición a la que no le gusta esto. Precisamente, la disminución de nuestra votación a mi modo de ver, está vinculada al descenso de la movilización política de la población y la predominancia de la movilización electoral. Este es uno de los fenómenos más graves que viene ocurriendo y que puede hacer peligrar nuestro proceso haciendo derivar nuestra democracia hacia una perpetuación de la democracia representativa.
6.5) El rasgo anterior tiene que ver con la naturaleza de nuestros debates. La base popular revolucionaria va mucho más allá del PSUV. Esa base también es diversa y plural y si se pretende colocarle una chaqueta de fuerza partidista, este proceso puede hundirse en una mezcla de sectarismo y autoritarismo. Una centralización excesiva podría provocar un estallido de la base popular y la maduración de peligrosas fuerzas centrífugas. En cambio el fortalecimiento de las redes sociales y su convergencia en torno a un programa y sobre todo en torno a iniciativas revolucionarias, puede multiplicar las fuerzas en forma ilimitada. Que eso pueda convivir con el PSUV dependerá mucho de si el PSUV respeta la autonomía de las redes populares o las considera como correas de transmisión.
Hay elementos poderosos que contrapesan las fuerzas centrífugas. Por una parte, el poder movilizador de las ideas, del programa revolucionario y de las iniciativas transformadoras en la medida que generan poderosas fuerzas centrípetas; por otra parte, el liderazgo del Presidente Chávez como fuerza de convergencia unificadora. Inevitablemente habrá debates públicos y deben ser bienvenidos, entendiendo que la creación, la reflexión y la práctica revolucionaria, no se agotan en el PSUV. Todo lo contrario.
La sabiduría consiste en saber orientar los debates dentro de un estilo respetuoso y un contenido que fortalezca el proceso revolucionario. Más que de normas, se trata de una práctica y un aprendizaje colectivos. Como decía Rosa Luxemburgo, la cantidad lo hará. Es decir la presencia de un pueblo cada vez mas consciente, sabrá discernir y escoger, mejor que los burós o conjuntamente con los burós si estos entienden de qué se trata, las buenas semillas para continuar la siembra y generar una cosecha cada vez mayor y mejor, un horizonte hecho presente.
Los miembros del PSUV debatirán según las reglas que el PSUV establezca. Eso es claro y desde fuera es necesario respetarlo.
He dicho que la reflexión y la práctica revolucionaria, no se agotan en el PSUV. Inevitablemente habrá debates públicos y ello va a ser positivo. Ahora hay que crear una corriente de opinión para que los revolucionarios debatan para fortalecer la revolución, no para debilitarla.
La critica rabiosa de los errores, la crítica que de hecho, independientemente de las intenciones, golpea al proceso, debe evitarse. La crítica de los errores no debe ser censurada, pero debe haber el compromiso de cuidar el tono, el estilo. No se trata de chantajear a nadie, pero las amenazas que este proceso tiene no son una fantasía, son reales. Entonces, no se puede tratar al Presidente Chávez o al PSUV u otras instancias, como si fuesen el enemigo principal. Sin silenciar las críticas o los errores, sin considerar que son intocables, no se puede olvidar la pedagogía revolucionaria y la responsabilidad con la base popular revolucionaria.
La crítica debe expresarse de tal manera, que ayude a la educación, a la maduración de la conciencia y el alma populares. De lo contrario puede ser desmoralizante.
Como resultado de errores, ineficacia y burocratismo, hemos experimentado golpes y ciertos sectores populares se han ido frustrando y desesperanzando. La crítica no puede ignorar este hecho, que es real. Por tanto, no puede contribuir a la desesperanza. Tenemos el deber de criticar, pero fundamentalmente el deber de descubrir caminos o por lo menos veredas, a través de propuestas que contribuyan a darle cauce a la esperanza. Lo esencial, creo, es que la gente va encontrando su propio camino, pero ello no se realiza en solitario, de forma individualista. Los caminos de transformación de la vida se encuentran junto con el otro o la otra, en aprendizaje compartido a través de formas de organización, de participación, que son creaciones colectivas.
El individuo racional, sujeto del mercado, construye soluciones fundadas en el egoísmo, a través de los procesos de socialización del mercado, que tienen como denominador común, la competencia. Es la lógica del triunfo de la eficiencia sobre la ineficiencia, es la justicia del mercado que privilegia al que adquiere capacidades para competir y logra triunfar. Es él éxito fundado en el poseer, que sustituye al ser.
Es la lógica de la globalización neoliberal, que penaliza al que fracasa por ineficiente, por no saber aprovechar las grandes oportunidades que el mercado ofrece para que cada quien, desde el ego, construya su propio camino. El derrotado es responsable de su propia derrota. Las relaciones de poder, las desigualdades, la injusticia, no son el problema. Los miles que en el mundo van triunfando son la prueba. Los derrotados no tienen otro camino que la marginación y la exclusión, pero ello es justo. En todo caso, pueden sacar fuerza del egoísmo para salir del montón, para destacarse y triunfar. Tienen que entender la lógica del mercado y actuar racionalmente.
Uno de los actos finales hacia los cuales está conduciendo esa lógica, es hacia el alcoholismo, la drogadicción, la prostitución y finalmente, incluso, al suicidio.
De verdad hay que confiar en el pueblo, que cuando va madurando es capaz de forjar siglos en días, en semanas y generar sus propios liderazgos. Esto ya lo hemos visto, lo hemos vivido. También hemos vivido cómo liderazgos consagrados van siendo relevados naturalmente por liderazgos naturales forjados en el combate teórico y práctico. Y cómo los verdaderos líderes ceden el paso a los nuevos y se mantienen humildemente aportando experiencia y sabiduría acumulada.
Cuando hay pueblo los debates toman un sentido distinto a algunos de los debates en los que nosotros participamos. Una decena, una veintena, una centena, incluso miles, de cuadros y militantes separados de la lucha viva del pueblo, halando la carreta en distintas direcciones. No estoy desmeritando esa parte de nuestra historia y la de otros. Rica en debates, en intercambio de ideas, en hechos heroicos y también en errores. En momentos en los que las luchas populares bajaron de nivel, nos fuimos aislando.
Así llegamos hasta aquí, incansablemente batallando, sobreponiéndonos a numerosas derrotas que nos han enseñado mucho. Hoy día tenemos un aprendizaje, no sé si lo suficiente, pero importante, sobre lo que no se debe hacer y probablemente sepamos algo sobre lo que se deba hacer.
Es el momento de aprender de los consejos que Marx dio a los miembros de la I Internacional. Él recomendaba la práctica común y la reflexión sobre esa práctica como el camino para el crecimiento político, moral y espiritual. El camino para la unidad.
Estos rasgos, más otros que ahora omito, constituyen uno de los grandes tesoros de nuestro proceso. Preservarlos y multiplicarlos con una orientación constructiva, es una de las formas de apoyarnos en nuestras propias fuerzas incrementándolas.
Como se verá no vengo haciendo propiamente un análisis, sino más bien una problematización de la situación. Ahora quiero avanzar con otros temas.
Creo haber hecho cierta fundamentación acerca de por qué estamos en una fase decisiva. La problematización que he realizado me lleva a plantear la necesidad de dar algunos pasos concretos. Algunos, sólo algunos. Los pasos estratégicos y tácticos que daremos serán el resultado de una elaboración colectiva. Las sugerencias personales, ayudarán y mucho.
Con ese espíritu voy a realizar algunas propuestas.
1) Es de la mayor urgencia trabajar por la construcción dentro de nuestro proceso, de una corriente revolucionaria. Esa corriente no va ser una obra nuestra, sino de la acción y convergencia de muchos revolucionarios con muy variada trayectoria, diversidad de experiencias, de ideas, de visiones, pero unidos en la necesidad de fortalecer este proceso y profundizar la revolución venezolana. Esto se lo viene planteando y haciendo mucha gente. Lo importante ahora es la convergencia de esfuerzos. No estamos descubriendo nada. Es un imperativo de los tiempos. Incluso, de los aspectos críticos y autocríticos que hizo el Presidente Chávez en su intervención en el Teresa Carreño.
2) Como parte de ese proceso aquellos que venimos de orígenes y experiencias comunes, que hemos compartido muchas batallas y que no sólo nos relacionamos por las ideas y practicas comunes, sino también por el afecto, la camaradería y la vida compartida, tenemos el deber de reencontrarnos.
3) Sugiero desarrollar un proceso que tenga una primera culminación en diciembre próximo con un importante encuentro nacional, donde establezcamos las bases iniciales del reencuentro, la plataforma básica que servirá de eje a nuestras luchas comunes. Instrumentos que estaremos evaluando, revisando, replanteando siempre, no sólo desde el punto de vista teórico, sino muy particularmente de acuerdo con los resultados de la experiencia. Un proceso que no es para competir, es para converger, particularmente en las luchas concretas.
Al imperialismo, al capitalismo, a la derecha venezolana e internacional hay que enfrentarlos y derrotarlos. El Polo Patriótico que ha propuesto el Presidente Chávez puede ser una herramienta clave.
La necesidad de debatir no puede estar más allá de la práctica común. El mejor debate es sobre la base de la experiencia popular, las citas de textos serán un complemento, pero no el criterio de verdad sustantivo. Poner a prueba los programas y propuestas es la llave del principio de unidad y lucha, de estudiar y luchar, tratando de luchar bien.
4) Desde ahora dejo claro que somos parte de este proceso, que no vamos a competir por espacios políticos convencionales o no convencionales. Vamos sí a continuar trabajando por el crecimiento y la multiplicación de la conciencia popular. Es decir, trabajar con el pueblo, dentro del pueblo, como uno más. Las ideas originales son importantes, pero hay que contrastarlas con los resultados de la experiencia. Una y otra vez. No se trata de imponer una especie de “dictadura” de la experiencia. Quien escribe nunca ha despreciado la teoría. Lo que no debemos hacer es un debate libresco. Mucho daño nos hizo. De eso creo que aprendimos.
Tampoco se trata de la militancia obligatoria en un barrio, en una fábrica, etc. Quien escribe ha militado en barrios, campos, universidades, en el extranjero, por todos los rincones. Pero la militancia también es diversa y plural. Una playa son millones de granos de arena cuando dichos granos están interconectados, interrelacionados y son complementarios, cuando ningún grano es más grano que otro. Esto es ecología. El último, el más alejado, también es playa. Luego, ¿quién decide cuál grano está más alejado o más cercano? Es posible que ni siquiera el mar lo sepa, incluso, que no le interese, pues a lo mejor lo que le interesa es el conjunto, la playa. Así, la magia del pueblo se realiza cuando este se va conformando como un conjunto complejo, diverso, pero con una clara frontera con el antipueblo, ese que sólo le interesa, tener, poseer a costa de la vida, la de la gente y la de la naturaleza.
Esto significa, entre otras cosas, elevar la capacidad de pensar con cabeza propia, por tanto, la consolidación del empoderamiento de la gente. En verdad, esto es lo que significa ser radicales. Es decir cuando la autogestión y la capacidad de autogobierno por parte del pueblo van creciendo y va dejando de hacer falta un Estado benefactor, pues el pueblo se va transformando en productor: de instituciones, nuevas relaciones solidarias de producción, de sueños que se hacen realidad, de bienes terrenales y espirituales, en fin, de fe y esperanzas.
5) Implica también profundizar la batalla por las ideas, pero también por la profundización de la práctica dentro del movimiento popular. Que crezcan innumerables organizaciones populares, porque innumerables son los problemas que requieren solución. Pero no con un espíritu de fragmentación de las luchas o fractura de las organizaciones populares. La unidad es clave, la dispersión nos debilita.
6) Una medida que nos ayuda a construir la unidad, es la elaboración de un programa básico de las luchas populares. Un compendio breve, a la vez complejo y sencillo, que no es lo mismo que simple. Esta debe ser una de nuestras tareas inmediatas.
7) Una de las medidas que debemos tomar es preparar la publicación de un periódico o una revista. Mi sugerencia es que comencemos por construir una publicación digital, que una vez elaborada, con un click la podamos poner en Venezuela y en el mundo. Seguramente no habrá revista única, pues un proceso tan diverso como este difícilmente pueda tener expresiones únicas.
8) Las siete medidas anteriores, serían una parte, de nuestra contribución a la consolidación de una corriente revolucionaria dentro de este gran proceso que es la revolución bolivariana.
Concluyo aquí estas notas. Son eso, unas notas, no un trabajo orgánico, consolidado. Tendrán como título Notas Urgentes, pues lo que intentan es incentivar la urgencia de dar pasos para fortalecer nuestro proceso.
Están escritas de corrido. Sin mayores correcciones o revisiones. Lo estoy terminando y así, con el calor de la esperanza, las voy entregando a Uds. Disculpen vacíos o ambigüedades. Será entre todos como construiremos una propuesta y un pensamiento más profundo. Finalmente, será el pueblo el que construya su propio camino y nosotros somos y seremos parte de ese pueblo, más acá y más allá del último suspiro.

Nota: sobre la marcha le he ido haciendo revisiones en párrafos específicos sin modificar la estructura del documento ni sus objetivos como instrumento problematizador. Esta es la tercera revisión.

Reforma o Revolución…Reflexiones post 26-S!

Prensa YVKE Mundial/ Dayana Contreras
"Hemos podido tener otros resultados si quizás las fuerzas de la revolución hubiese estado todas en consonancia, en unidad…”, fueron palabras de Hindu Anderi, activista polìtica y moderadora de la actividad.
El foro denominado ¡Reforma o Revolución…Reflexiones post 26-S!, es un espacio para la autocrítica, para el debate, para el intercambio de opinión, de análisis acerca de los resultados del pasado 26 de septiembre; “nosotros entendemos que hemos podido tener otros resultados si quizás las fuerzas de la revolución hubiese estado todas en consonancia, en unidad…”

Fueron palabras de la activista política y moderadora de orden Hindu Anderi, en el foro que se llevó a cabo en la sala 1 del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo


Foto: Franklin Rodríguez
Gallegos (CELARG), ubicado en Altamira, al foro, junto a Hindu Anderi asistieron en calidad de ponente el historiador Vladimir Acosta; Amilcar Figueroa, miembro de la dirección en Caracas del PSUV; Carlos Betancourt, ex guerrillero y Eduardo Samán, ex ministro de comercio.

Según Anderi, hubo algunos factores que pudieron haber incidido en los resultados de las elecciones parlamentarias, por lo cual se decide realizar este Foro Itinerante de Participación Popular, en el cual se escucharon diversas opiniones sobre la necesidad frenar el avance de los factores de derecha y proteger el liderazgo del presidente de la República Hugo Chávez en beneficio de salvar un proceso de esperanza para la el país.

Expresó la activista política que existen dentro del proceso bolivariano algunos sectores excluidos. “Excluidos unos y autoexcluidos otros, esto lo ha reconocido el propio presidente de la República cuando ha llamado a la necesidad de organizar un Polo Patriótico alrededor de la Revolución bolivariana…”, agregò Hindu Anderi.

Ninguna revolución que no tienda a la autocrítica puede ser una revolución

El no haber conseguido la mayoría calificada en la Asamblea Nacional, lo cual era una meta, invita a la reflexión, “es el momento en que el proceso se detenga y vea que es lo que ha hecho, que le falta por hacer y en qué circunstancias se encuentra… Ninguna revolución que no tienda a la autocrítica puede ser una revolución, que no reflexione y se revise puede ser una revolución”, dijo.

Resaltó que es el momento de llamar a sectores revolucionarios que tienen opiniones contrarias a las políticas que se están desarrollando en el gobierno para que dentro del proceso se discuta.

No creen en el sector oposición que va a estar en la Asamblea, resaltaron creer que son factores de la CIA internacional y que estarán haciendo vida en la Asamblea, “creemos en una revolución sana que dentro del propio proceso nos haga ver y entender cuales y donde están las fallas, que podamos hacer una contraloría colectiva que sea enunciativa”, reiteró.

Citó al Che, al referirse a los errores de la Revolución, donde agregó que todos los errores de la revolución tienen que salir a flote con la finalidad de corregirlos. “El proceso revolucionario no está en peligro porque se digan las fallas o los errores que hemos tenido…” “La salvación del proceso revolucionario está en que nosotros asumamos consciente y responsablemente que tenemos fallas, y que las podemos corregir dentro del proceso”, expresó Anderi.

Por su parte el ex guerrillero Carlos Betancourt, en su intervención expresó traer crítica para con el presidente Hugo Chávez, quien en sus palabras se ha dedicado a conducir la revolución democrática socioburguesa, donde se ha dedicado a construir el papel del estado burgués, como epicentro del quehacer productivo.

“El presidente Chávez es el líder de una sociedad socioburguesa, en Venezuela el socialismo se ha convertido en una palabra de utilería”. “Al hacerle una radiografía a estos 11 años de gestión del gobierno bolivariano, el desánimo nos afecta porque como resultado tenemos la materialización de un emplasto social político y económico y que de hecho a entrado en una fase de agotamiento que avizora la posibilidad de que sus contradicciones internas nos conduzcan a un restaurar de las posiciones fascistas de la vieja posición contrarrevolucionaria”, agregó Betancourt.

Expresó además, “la élite bolivariana, que actualmente administra el proceso democrático burgués política ideológica e históricamente está impedida para seguir conduciendo el destino de este país: Más aun cuando se trata de hablar del socialismo”.

Betancourt: Como consecuencia del 26S una oposición que se siente envalentonada

Carlos Betancourt expresó que los resultados del 26 de septiembre no les causó sorpresa, pues agregó que el presidente Chávez se dedicó a retar a la oposición reaccionaria, y a ligar la contienda en el terreno de la formalidad burguesa, (terreno electoral); donde desde las palabras del ex guerrillero la oposición es mucho más diestra y dispone de mecanismos de conjunción sobre la conciencia colectiva.

“El presidente Chávez y el PSUV centraron sus objetivos políticos en ganar la mayoría en la Asamblea Nacional que es la institución burocrática del aparato burgués, por ello este ensayo bolivariano debe depender de las maniobras de los malabarismos de una institución dende tenemos como representantes a elementos anti comunistas oportunistas y busca fortunas”, resaltó.


Enumeradas sus críticas, Carlos Betancour se refirió a lo que debería ser la verdadera intención de la revolución que debería ser derrotar a la contrarrevolución, aunque solo se han dedicado a mantener al presidente Chávez en su puesto. Se refirió a unas declaraciones de Aristóbulo Istúriz, resaltando que este (Istúriz) expresó que el no haber conseguido la mayoría de votos en las elecciones del 26S se deben al problema de la luz. “El problema de la luz si es verdad, porque a los compañeros se les ha perdido la luz y el porvenir”, agregó.

Para él existe una razón de fondo para que haya venido hundiendo el pesimismo en la conciencia colectiva, “no hemos respondido a la inseguridad social, no hemos respondido a la inseguridad en los barrios ni en los pueblos de Venezuela; hemos resuelto en partes el problema de la vivienda, la soberanía agroalimentaria todavía está latente… Por otra parte hay una decretomanía de producir organizaciones sociales atadas a las decisiones de gobernadores alcaldes y funcionarios públicos”.

Resaltó que se existen síntomas de desmotivación y pesimismo en la base que apoya al presidente Chávez, a la vez que expresó “hay una especie de agotamiento del discurso del presidente”. Las tres R de las que habla el presidente de la República (Revisión, Rectificación y radicalización del proceso) “brillan por su ausencia”. Por lo cual, para concluir reiteró el llamado al creación de un programa que encamine hacia el socialismo.

“Invito a la gente aquí presente a que creemos un programa que nos encamine hacia el socialismo, tenemos que construir ese programa”; puntualizó.



Presencia del presidente Hugo Chávez es fundamental en la Revolución socialista

Agencia Venezolana de Noticias
Caracas, 18 Oct. AVN .- Tres analistas políticos coincidieron en señalar que la presencia del presidente de la República, Hugo Chávez Frías, es fundamental para profundizar la revolución socialista que se vive en Venezuela desde hace más de una década.
Así lo manifestaron, la tarde de este lunes, en un foro denominado "Reforma o Revolución, reflexiones post-26S", que se realizó en la sala 1 del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (CELARG), con el objeto de analizar el panorama político nacional luego de las recientes elecciones parlamentarias.
Tanto Amílcar Figueroa, Eduardo Samán y Vladimir Acosta coincidieron en la necesidad de generar espacios para el debate y la autocrítica, refiriéndose al llamado que hizo el Mandatario nacional, luego del proceso electoral legislativo del 26 de septiembre, a revisar, rectificar y reimpulsar el proceso, pero, esta vez elevado al cuadrado.
Sostuvieron que se debe frenar el avance de los factores de la derecha, donde quiera se encuentren, para proteger el liderazgo de Chávez, en beneficio de salvar un proceso, el cual significa esperanza para la región.
Figueroa, quien es miembro de la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), indicó que dentro de la militancia es necesario que se produzca una rectificación profunda en el campo de las ideas y en la práctica.
“No se trata de pasar factura tratando de responsabilizar a alguien por los resultados electorales, sino de revisar las políticas que hemos venido desarrollando de tránsito al socialismo”, comentó.
Destacó la importancia de no poder permitir que se siga profundizando el escepticismo entre los sectores populares de la población, por lo que sugirió que el PSUV debe enfocar la línea de trabajo en el movimiento social.
Puntualizó que la Revolución reclama reflexión poniendo de lado los intereses individuales, para así fortalecer una corriente de socialismo revolucionario en el país.
“No es posible una revolución sin pensamientos críticos ni debate de ideas”, precisó.
El integrante de buró político insistió en que es a través del camino electoral que se logrará una Patria socialista para construir una hegemonía social del mundo del trabajo.
“En Venezuela se rompió la estructura de desligación de élites y eso abrió la posibilidad real de que se iniciara un proceso revolucionario”, añadió.
Manifestó que el presidente Chávez impulsó un proceso constituyente que amplió sensiblemente la democracia. Agregó que en estos 10 años se ha golpeado severamente a los sectores monopólicos de la agroindustria y que en general se ha desarrollado una conciencia política.
Por su parte, el ex ministro del Poder Popular para el Comercio, Eduardo Samán, puntualizó que en Venezuela es necesario crear una corriente radical que no sea extremista porque urge corregir y rectificar, pero sin crear fracción ni sectarizar.
“Debemos hacer una referencia en los principios internos y estar aferrados a la idea de que queremos impulsar el proceso. Los revolucionarios no tenemos que irnos de este proceso, tenemos que revisarlo, rectificarlo y reimpulsarlo”.
En tato, el historiador Vladimir Acosta, resaltó que los resultados electorales se interpretan no como un triunfo de la oposición sino como una advertencia al proceso, para que a través del trabajo, debate de ideas y autocríticas se consolide y reafirme la Revolución Bolivariana y el amor que siente el pueblo por su líder, Hugo Chávez

Parlamentarias 26-S: Un análisis preliminar (y respuesta de Javier Biardeau a su nota)

SABER Y PODER
LUNES, 27 DE SEPTIEMBRE DE 2010 22:40
REINALDO ITURRIZA
Entre otras cosas, puesto que la definición de una agenda tendrá que ser obra colectiva, hay que revisar la relación entre el partido/maquinaria y la amplia base social del chavismo, que están lejos de significar lo mismo. Allí donde el partido está alienado del chavismo popular, mal puede pensarse que funciona como "vanguardia".
Exactamente a las 2 de la mañana de este lunes 27 de septiembre, la Presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, comenzó a ofrecer los resultados prelimares de las elecciones parlamentarias. Con una participación global del 66,45%, el chavismo ha alcanzado 95 diputados, la oposición 64, quedando 6 cargos en disputa. Aún no están disponibles las cifras oficiales globales de la votación para cada fuerza política, a menos que se tomen como tales los datos (que es necesario verificar) referidos al Parlatino: 5 millones 222 mil 354 del PSUV contra 5 millones 54 mil 114 de la MUD (una diferencia de 168 mil 240 votos).
Despejada la duda sobre los resultados electorales, descartados el peor escenario (victoria opositora) y la mayoría absoluta del PSUV (dos tercios o 110 de un total de 165 diputados), lo primero que hay que decir es que el objetivo principal se alcanzó: el chavismo se mantiene como la fuerza política mayoritaria del país (con el 57,5%, hasta ahora, de la nueva Asamblea Nacional).
Esta situación le permite asumir con mayor holgura y capacidad de maniobra el siguiente objetivo: repolarizar la sociedad venezolana. Mucho especularon los voceros opositores sobre la necesidad de "derrotar" al chavismo, impidiendo que alcanzara los dos tercios de la Asamblea Nacional, porque esto implicaría la "radicalización" del proceso venezolano. El problema es que en el discurso opositor, como lo sabemos de sobra, esta "radicalización" significa la consolidación de un sistema "totalitario" y "comunista", que cercana las libertades políticas del pueblo venezolano. Tocará a las fuerzas opositoras evaluar la pertinencia y sobre todo las falencias de un discurso que le ha impedido, una y otra vez, granjearse el apoyo de las mayorías. Cantarán victoria, sin lugar a dudas, pero la procesión va por dentro (un proceso incipiente de recomposición de su clase política). Pero éste es un asunto que no nos compete. Dicho sea de paso: el peor error que puede cometer la vocería oficial del chavismo es enfrascarse en una polémica estéril con la partidocracia, intentando "demostrarle" que no ha vencido. Lo otro es evitar el triunfalismo acrítico, que en estas circunstancias es el peor de los consejeros.
Repolarizar significa precisamente esto: avanzar en el proceso de radicalización democrática de la sociedad venezolana. Sí, radicalización democrática. Ésta implica recuperar y afinar "los mecanismos de interpelación mutua entre Chávez y la base social del chavismo, buena parte de la cual está hastiada de la cortedad de miras estratégica del chavismo oficial, que insiste en comportarse como minoría". Implica recuperar lo que hizo grandioso al chavismo: si éste "significó la progresiva politización del pueblo venezolano, fue porque hizo visible a los invisibles y dio voz a los que nunca la tuvieron". Significa, de igual forma, una lucha sin cuartel contra "burócratas, corruptos, dirigentes mediocres, oportunistas, estalinistas", ninguno de los cuales "es hegemónico en el chavismo. Su existencia está lejos de ser aceptada de manera cómplice o resignada por el resto, y en cambio es fuente permanente de malestar y conflicto". Significa, también, saber leer los signos, donde los hubiere, de "hastío por la política" en las bases sociales del chavismo.
Entre otras cosas (puesto que la definición de una agenda tendrá que ser obra colectiva), lo anterior implica revisar la relación entre el partido/maquinaria y la amplia base social del chavismo, que están lejos de significar lo mismo. Allí donde el partido está alienado del chavismo popular, mal puede pensarse que funciona como "vanguardia". Ejemplos sobran de luchas, dinámicas y formas de organización popular en peligro de ser cooptadas (o cooptadas ya, con el saldo de la desmovilización popular) por el partido. Implica también un amplísimo debate sobre la necesidad de relanzar el objetivo de crear una nueva institucionalidad (derrotando al Estado burgués), lo que pasa por reducir la distancia que media entre el socialismo en tanto que horizonte estratégico, y las formas de gobierno propiamente socialistas. Esto quiere decir que es necesario preguntarse: ¿qué significa gobernar socialistamente? ¿Qué distingue a un gobierno socialista (en la práctica, en el cómo del gobierno) de las formas de la vieja partidocracia y los métodos de la burguesía parasitaria? Esto es: en lugar de la "gestionalización" de la política, "repolitización" de la gestión, subrayando, por supuesto que sí, su carácter de clase. Educación, salud y alimentación seguirán siendo las principales áreas donde será posible continuar ensayando la construcción de esta nueva institucionalidad, defendiendo los logros obtenidos pero sopesando y corrigiendo las fallas.
Un dato en particular, y ya habrá tiempo de analizarlo con mayor detenimiento, refuerza la hipótesis de la necesidad de la repolarización: la derrota aplastante de las fuerzas políticas (y en particular del PPT) que hicieron de la "despolarización" la bandera de su campaña.
El propósito de este análisis preliminar, que puede resultar incómodo para algunos, no es hacer leña del árbol caído. A menos que, efectivamente, los haya quienes se asuman caídos, derrotados o en desventaja e intenten ocultar su derrota con discursos triunfalistas. Tanto el triunfalismo como el derrotismo son pasiones tristes, y lo que está en juego es algo muy serio como para encarar las nuevas circunstancias de manera vacilante o con ínfulas de superioridad. Sobreestimar la propia fuerza es la vía más fácil para perderla. Quien la subestima, está perdido de antemano.
Considero que el escenario que se abre a partir de los resultados del 26-S hace absolutamente pertinentes todas estas reflexiones e interrogantes (entre otras). Por eso, estoy convencido de que la revolución bolivariana ha sido la gran vencedora. Es tiempo de deliberación, de revisión, de invención. Es el tiempo de las oportunidades: de la posibilidad infinita de imprimirle mayor vitalidad y fortaleza a un proceso que, doce años después, aún es capaz de alcanzar una "sólida victoria", lo suficiente como para avanzar en la creación de las condiciones que hagan posible su radicalización democrática. Son tiempos de revitalización política. Bienvenidos sean.
Y la respuesta de Javier Biardeau R. 27 de septiembre de 2010
09:15 Esta bién bueno este artículo para provocar una discusión necesaria, pues parte de las premisas del espejismo-gerrymandering a la hora de analizar porcentajes. La delimitación de las cricunscripciones o circuitos de una manera acomodaticia se denomina en Ciencia Política gerrymandering. En 1812, el gobernador de Massachusetts, Elbridge Gerry, aprobó una ley por la que se arrogaba la competencia para redibujar los distritos electorales de su estado, escogiendo el adecuado porcentaje de electores para asegurar que determinados candidatos de su partido ganaran la elección. Lo que no puede ocultar este sistema, es que lo que decide son los votos, y allí es que hay que meter la lupa, no en los cargos conquistados, que generan una ilusión de victoria, cuando se confirma la tesis de que la mayoria simple se lo lleva todo. Seria conveniente que el amigo reinaldo consultara la página http://www.cne.gob.ve/divulgacion_parlamentarias_2010/index.php?e=11&m=00&p=00&c=00&t=00&ca=00&v=02, y analizará las diferencias reales de votos en cada circunscripcion y en cada estado. Y asi finalmente dibujara el mapa de votos totales del país, y las ventajas absolutas y porcentuales. Mi conclusión preliminar es la siguiente: Estamos bastante mal si comparamos con los ultimos procesos electorales del chavismo: 2006=7.309.080, 2007= 4.379.932, 2008= 5.611.140, 2009= 6.310.482. Estamos parados en un escenario de votos totales que se mueve entre la fallida reforma constitucional y las elecciones regionales del 2008. No se ha despejado ninguna duda, pues el peor escenario para un proceso de flujo revolucionario es precisamente no haber llegado a las 3/5 partes (99 puestos), por ahora, y no la tan cacareada victoria opositora por mayoria simple. Nadie se chupa el dedo a estas alturas. La mayoría calificada del PSUV (3/5 o 2/3, 99 o 110 de un total de 165 diputados) era el objetivo estrategico principal. NO caigamos en una suerte de opio para consolar tontos. Hay una victoria pirrica en demasiados circuitos (menos de 5 % de diferencia): ¿O no es así?. El chavismo se mantiene como la fuerza política con mayoria simple, y vive una verdadera arritmia electoral desde el 2006. Discrepo de su apreciación principal: Esta situación no le permite asumir con holgura suficiente ninguna política con audacia, y menos con temeridad, hasta que no se reencuentre con una precondición basica: reagrupar sus bases sociales de apoyo y los cuadros de diferentes formaciones políticas para una reconquista de la hegemonia popular-revolucionaria. Sin esta precondición, NO hay capacidad de maniobra para el siguiente objetivo: repolarizar la sociedad venezolana. Me parece una tesis sin fundamentos, si escapa a la consideración de una lógica hegemónica. NO son especulaciones, son realidades. Ha sido "derrotada" la intención de alcanzar la mayoría calificada. No hay consolidación del proceso revolucionario, con estos resultados, he allí el problema, si comprendemos las tareas de una agenda legislativa revolucionaria, la promulgaciones de leyes organicas, la designación de cargos decisivos en el cuadrante institucional del Poder Público Nacional, la posibilidad de entregar puestos en comisiones estrategicas, de volver al sabotaje parlamentario, etc. Las fuerzas opositoras estan en flujo electoral asecendente y continuo, y estan concretando su visión de una política de mayorías electorales. Estimado, la procesión va por dentro del campo revolucionario, y debemos ser honestos. El auto-engaño no es mejor consejero. La voluntad se construye con optimismo, pero no sub-estimemos fuer-as adversarias ni sobre-estimemos fuerzas propias. ES UNA CLARA SEÑAL DE ALERTA. HAY DESGASTE, ASOMENSE A LOS VOTOS, NO A LOS ESPEJISMOS (CARGOS). SALUDOS. Javier Biardeau R.

BREVE NOTA SOBRE LOS RESULTADOS ELECTORALES


                                                      Juan Medina Figueredo

Se logró derrotar los planes del imperialismo y de la derecha en las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre de este año, en un esfuerzo titánico frente a la conspiración internacional  e interior; pero no sólo estamos perdiendo adhesiones  en varios sectores populares, sino que la derecha se mantiene firme en su caudal electoral y hasta avanza en algunos lugares, mientras la alianza PSUV-PCV retrocede  en  muchos  estados y entre febrero del 2009 y septiembre  de 2010 ha perdido dos millones de votos, como bien lo apunta Díaz Rangel. En general, en varios  estados ha mermado la votación bolivariana y socialista,  esto desde el punto de vista numérico absoluto. Las causas que se han señalado: ineficiencia burocrática, funcionarios públicos  "matavotos",  en algún caso dirección de la campaña electoral por técnicos que no dirigentes populares ( según se ha dicho,  PDVSA en Anzoátegui), grupos oportunistas y arribistas enquistados en el Estado y en el PSUV; el anticomunismo, problemas crónicos ( inseguridad, corrupción, ausencia de planes importantes de vivienda, estado de las vías, deficiencias de servicios públicos, basura, etc.),  agregaría el sectarismo, etc.  Lo grave del asunto, además, según Eva Golinger, consiste en que los Estados Unidos tienen a sus agentes ahora en la Asamblea Nacional, ya no son simplemente miembros de un partido opositor o de una ONG, ahora son diputados de la AN. Según ella, la USAID sigue actuando en Venezuela tranquilamente, repartiendo dólares, entrenando y orientando a sus agentes.
            Julio Escalona anota que no logramos las dos terceras partes de la votación,  que muchos de nuestros funcionarios públicos están lejos de actuar como servidores públicos y que todo esto afecta el ánimo de la gente, pero que sobran razones para comprometerse a fondo en el cambio de nuestra sociedad y del mundo. El Presidente  Chávez  ha señalado que los militantes socialistas deben practicar la humildad, el amor y la alegría, cobijar al pueblo, a los sin voz, sin techo  y hasta sin cédula y atender a la satisfacción de las necesidades cotidianas de la gente.  Abandonar rasgos de arrogancia y sectarismo, escuchar, mirar de frente al otro, volver a la vinculación con las comunidades cristianas de base.  A los nuevos diputados a la Asamblea Nacional les orientó para que se afirmaran en el estudio y en el compromiso de verdad con el pueblo legislador, abandonando la comodidad de las oficinas y el aire acondicionado, llamó a constituir entre ellos una escuela de formación, incluso prometió asistir a esa escuela y realizar algunos exámenes. Esto no es otro cosa que afirmar que si no hay cambio personal, en el pensamiento y el sentimiento profundo, en las actitudes, no es posible cambiar la realidad exterior.  Además, la pereza es un pecado, es necesario estudiar, trabajar y esforzarse con rigor y disciplina, servir a Dios, al prójimo, al bienestar de la sociedad,  a la paz, a la naturaleza, a la salvación de la humanidad y de la tierra. La independencia nacional, la integración del sur,  la igualdad social, la democracia, el socialismo, la cooperación internacional,  la paz y la defensa de la tierra,   son  nuestras banderas.
      Valencia,  República Bolivariana de Venezuela, 3 de octubre de 2010